Odita al viento

                                                                          

                                                                           Viento.

No me lleves, Viento,

que en este momento

tengo mucho que hacer.

Viento.

Quédate conmigo, Viento.

Si no sigues violento,

tenerte será un placer.

Viento.

Si te acomodas en aire

quedito, quedo,

respiraré mejor,

pues tú ausente, no puedo

respirarcomo quiero

una y otra y otra vez.

Viento,

Viento valentón,

déjame sentado

a mi modo en el sillón.

Viento.

Viento vendaval,

no nos soples tanto

y líbranos del mal.

Viento.

Viento, General

de plantas y flores

y casas de cristal,

vete, vete, vete

ya a no más tardar.

Viento, Viento, Viento,

si no actúas así,

tiéndete en mí

con mi consentimiento.

Viento, Viento, Viento,

no te pillo ni al azar

de tanto movimiento,

pero es mi necesidad

dejarte contento.

Vuela, pero déjame

que termine la oda

que te dediqué

a cuenta de nada

y sin saber por qué.

Todo es viento, hijo.

Yo bien me lo sé,

viento de las hojas

queotro día escribiré

también, también.

Si te ofendí, perdóname.

Los amores vuelan,

yo también volaré.

Adónde, adónde

no lo sé.

¿A un paraíso que en la tierra

nunca tuve ni tendré?

Vete, vete, vete,

que contigo yo me iré

adonde nos refugie

no más Dios que Yaveh.

Prometeo, el del fuego,

que nos espere si quié,

que eterno asimismo es él.

Viento, Viento

qué corredor corcel

al que jamás de los jamases

me subiré y ensillaré.

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