Quietud de Navidad

Martes Navidad.
El Rey de la Tierra
ha nacido ya.
Anoche los niños
soñaron con Él
entre los regalos
de Papá Noel.

Y siguen durmiendo
mientras en las calles
luce un Sol espléndido.
El cielo caído
es azul de mar;
brilla en el ladrillo
y brilla en la cal.

Quietud en los árboles
que elevan su copa
de ramas al aire.
Perplejo el jardín.
No se oye un piar,
pues están los pájaros
guardando el Portal.

La noche del mundo
se acabó entre risas
 y cantos jocundos.
Ahora es el silencio
el que invade el alma
hasta los adentros
con paz y con calma.

¡Oh martes divino!
La Luz de los hombres
ya vino, ya vino.
Después de dormir
hay que despertar.
Dulce Nacimiento.
Dulce Navidad.


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